La hidroformilación, o síntesis oxo, se usa para la producción de aldehídos a partir de compuestos alquenos. La reacción se cataliza mediante compuestos de organorodio u organocobalto y añade un átomo de hidrógeno al enlace C=C para formar un enlace C-C y un grupo formilo para la molécula, lo que crea un aldehído. Los compuestos de aldehído formados mediante hidroformilación son la base de la síntesis de muchos otros compuestos, entre los que se incluyen los alcoholes, las aminas y los ácidos carboxílicos. Por lo tanto, la hidroformilación constituye una de las síntesis químicas más importantes para producir sustancias químicas a granel. Asimismo, la hidroformilación mediante catalizadores con un enlace metal-ligando específico se usa en la síntesis quiral de productos químicos y farmacéuticos finos más complejos. Aunque la hidroformilación se considera una aplicación de catálisis homogénea importante, se han desarrollado una serie de sistemas de hidroformilación heterogéneos, a menudo asociados con complejos de rodio sostenidos en varios andamios.