Refractómetro/Medidor de Brix

Un refractómetro digital, también conocido como medidor de Brix, usa el método de reflexión total para medir el índice de refracción o los valores relacionados de una muestra líquida. Esta medición se lleva a cabo de forma digital, de modo que reduce la influencia del operario de manera significativa. Se puede alcanzar una exactitud de hasta 0,00002 o 0,01 % Brix, usando un pequeño volumen de muestra (de 0,5 a 1 ml) y en poco tiempo de medición (unos segundos).

Los refractómetros digitales usan un diodo emisor de luz, un prisma de zafiro y un sensor óptico de alta resolución. Se coloca una muestra en el prisma y se inicia la medición. Desde un determinado ángulo de incidencia (el llamado “ángulo crítico”), el rayo de luz deja de atravesar la muestra, pero se refleja completamente desde la superficie y el sensor óptico lo detecta. El índice de refracción se calcula a partir del ángulo crítico. Además, los refractómetros digitales de sobremesa/medidores de Brix emplean un termostato Peltier integrado para controlar la temperatura de la muestra.

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El índice de refracción de una solución se puede medir de forma manual o digital. Métodos manuales como refractómetros ópticos portátiles y ABBE tienen un uso extendido para determinar el índice de refracción y valores relacionados, por ejemplo, los grados BRIX, el porcentaje de alcohol, Baumé, Plato, etc. Aunque estos métodos son bastante económicos y fáciles de usar, cada paso de los protocolos de operaciones manuales requiere una mano experta, lo que a menudo afecta a la exactitud y la fiabilidad de los resultados. Los refractómetros digitales/medidores de Brix se encuentran disponibles como instrumentos de sobremesa y portátiles. Sirven para medir muestras líquidas de forma digital, lo que reduce la intervención del operario de manera significativa.

Compare los refractómetros digitales con los métodos manuales: Observe las distintas técnicas de medición

Para la mayoría de los refractómetros de sobremesa, el volumen habitual es de 0,5 ml aproximadamente (en muestras con alta tensión superficial) y de 1 ml (en muestras con baja tensión superficial). Como solo se requieren unas gotas, las temperaturas de la muestra y de la célula de medición se igualan de forma rápida y el análisis, por ello, tarda muy poco tiempo.

Esto depende de la diferencia de temperatura entre la muestra y la célula de medición, así como del tipo de muestra y la exactitud requerida de la medición. Este tiempo de medición suele ser de unos segundos.

Por lo general, los refractómetros/medidores de Brix se ajustan con agua a una temperatura de medición específica. Esta temperatura se controla con un elemento Peltier, capaz de enfriar o calentar la célula de medición a una temperatura específica (por ejemplo, 20°C). A veces, los estándares Brix sirven para ajustar refractómetros a fin de medir concentraciones de azúcar. Estos estándares Brix se suelen producir in situ. La preparación de estándares de Brix inteligente puede llevarse a cabo con una balanza y un refractómetro conectados al software para PC LabX™, aumentando la exactitud y la trazabilidad, a medida que se eliminan los errores de transcripción.

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Los refractómetros digitales/medidores de Brix fueron diseñados inicialmente para medir líquidos homogéneos. En realidad, se pueden medir muchas otras muestras, como las pastosas o incluso láminas. Estas muestras específicas requieren algunos accesorios adicionales, como una prensa o un sello para láminas. Se debe tener especial cuidado con las muestras volátiles (donde se recomienda usar una célula de flujo) o muestras no homogéneas (la muestra debe agitarse u homogeneizarse antes de la medición). Esto puede llevarse a cabo de forma automática con la homogeneización dentro del vaso de precipitado del cambiador automático de muestras InMotion™.