Las carcasas de los sensores de pH de METTLER TOLEDO son componentes para la conexión de procesos que permiten la instalación de un sensor, garantizando resultados de medición óptimos y protección del mismo. Existe una amplia gama de diseño para ofrecer resistencia, seguridad, limpieza y rendimiento optimizado en entornos de proceso habituales. Para adaptarse mejor a las necesidades de su aplicación, van desde sencillos accesorios de inmersión hasta sistemas retráctiles automatizados.
Las carcasas de los sensores de pH y ORP (Redox) están diseñadas para asegurar que el sensor esté protegido y alcance la profundidad deseada para obtener resultados de medición óptimos en su aplicación.
METTLER TOLEDO ofrece carcasas de sensores no móviles, retráctiles, de paso de flujo continuo e inmersión, cada una con características específicas de resistencia, seguridad, limpieza y rendimiento optimizado.
Una carcasa de sensor se puede utilizar en depósitos abiertos, tuberías, depósitos cerrados, reactores químicos, biorreactores y recipientes de fermentación para albergar entornos de proceso comunes.
Gracias a la carcasa retráctil del sensor de pH u ORP (Redox), puede simplificar los esfuerzos de mantenimiento integrando la carcasa en un sistema de limpieza automatizado.
Hay disponible una amplia gama de opciones de materiales de la carcasa del sensor de pH, entre las que se incluyen el acero inoxidable, el titanio, el PVDF y el PVC, para adaptarse mejor a su entorno de funcionamiento y a su proceso.
METTLER TOLEDO ofrece carcasas de sensores de pH con diferentes estilos de conexión, tamaños de diámetro interior, longitudes de inserción y materiales de sellado de procesos para garantizar que sus necesidades de proceso sean satisfactorias.
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Una carcasa de sensor de pH es un componente físico que permite conectar un sensor de pH o un sensor de ORP (Redox) en línea a un proceso industrial para realizar mediciones continuas de control de procesos. También puede permitir que un sensor alcance la profundidad deseada en un recipiente abierto, tubería, depósito cerrado, reactor químico, biorreactor o recipiente de fermentación para la medición del pH.
Una carcasa de sensor de pH permite instalar un sensor analítico en línea en un proceso para garantizar que el sensor esté protegido y alcance las profundidades deseadas para obtener resultados de análisis óptimos. La carcasa del sensor de pH que elija dependerá de las condiciones de su proceso y de los requisitos empresariales. En función de la aplicación, cada uno de los tipos de conexión puede tener requisitos específicos de resistencia, seguridad, limpieza, rendimiento optimizado, resistencia a la corrosión, profundidad de inserción o espacio físico. El equipo de conexión al proceso va desde los acoplamientos sencillos de inmersión por caída hasta los sistemas automatizados más complejos, capaces de limpiar su equipo de medición METTLER TOLEDO puede ayudarle a seleccionar el equipo más adecuado para su aplicación.
METTLER TOLEDO cuenta con cuatro tipos diferentes de carcasas de sensores de pH. Las carcasas de pH fijas se instalan de forma fija en un recipiente. Se utilizan en condiciones estériles y se encuentran dentro de la gama de carcasas InFit. Las carcasas de pH retráctiles permiten insertar y retirar fácilmente el sensor de medición sin interrumpir el proceso en curso. Se utilizan en procesos que tienden a generar contaminación en el sensor o que se prolongan durante largos periodos de tiempo y en el rango de la carcasa InTrac. Las carcasas de paso de flujo están diseñadas para medir puntos en tuberías, ya que permiten un control continuo y la inserción directa del sensor en el medio de la muestra. Estas carcasas se encuentran en la gama InFlow. Por último, las carcasas de inmersión se utilizan en recipientes/canales abiertos y se encuentran dentro de la gama de carcasas InDip. Su diseño permite el montaje e inmersión del sensor en el medio.