La Guía teórica sobre el oxígeno disuelto ofrece una descripción clara y sencilla de los principios de medición del oxígeno disuelto (OD). Se explica la teoría del OD, así como los aspectos prácticos de elegir el sensor adecuado para una aplicación, calibrarlo y llevar a cabo mediciones del OD y la DBO (demanda biológica de oxígeno).
La Guía sobre el oxígeno disuelto abarca, entre otros, los siguientes temas:
- Teoría del oxígeno disuelto
- Tipos de sensores de oxígeno disuelto
- Manipulación de los equipos
- Demanda biológica de oxígeno
Benefíciese de esta guía y aprenda la teoría y la práctica de las aplicaciones de oxígeno disuelto.
1. Teoría del oxígeno disuelto
El oxígeno es el elemento más común del universo y el más frecuente en la corteza terrestre (49 %). No obstante, debido a la elevada reactividad del oxígeno, en su mayor parte se presenta ligado a otros elementos para formar compuestos químicos. El oxígeno elemental en sus dos alótropos, O2 y O3 (ozono), solo existe en concentraciones oportunas en nuestro planeta. Y esto se debe a que se origina a partir de procesos biológicos propios de la Tierra (principalmente, la fotosíntesis).
Por lo tanto, el oxígeno elemental y su existencia están ligados a la vida y a sus actividades químicas. Debido a su naturaleza reactiva, también contribuye a procesos menos deseables, tales como la corrosión o los riesgos de incendio.
Medir las concentraciones de oxígeno disuelto en el agua puede ser muy importante para el control de los hábitats (tales como lagos, mares o acuarios), procesos de producción (como la fermentación de la cerveza o el queso), el tratamiento de aguas residuales o procesos sensibles a la corrosión.
2. Tipos de sensores de oxígeno disuelto
El O2 es una molécula muy reactiva, de hecho, lo es tanto que solo existe en nuestra atmósfera porque se produce continuamente mediante la fotosíntesis. Reacciona como agente oxidante (es decir, recibe electrones en una reacción química). La mayoría de los sensores de oxígeno disuelto emplean esta propiedad de reacciones electroquímicas para medir las concentraciones de oxígeno. Estos tipos de sensores están bien asentados como métodos convencionales de medición. Se pueden categorizar como galvánicos o polarográficos. Los sensores ópticos constituyen una alternativa moderna a estos métodos electroquímicos.
3. Manipulación de los equipos
En este capítulo, se resumen algunas sugerencias y recomendaciones para el uso diario de los sensores de oxígeno disuelto. Se basan en reglas de manipulación y funcionamiento generalmente aceptadas.
4. Demanda biológica de oxígeno
Un análisis importante para evaluar la calidad del agua es la determinación de la DBO (demanda bioquímica de oxígeno). La BOD es un indicador de la cantidad de materia orgánica presente en el agua dulce. Unos niveles elevados de BOD pueden indicar que el agua está contaminada con bacterias coliformes, otros patógenos y compuestos orgánicos, y que, por lo tanto, no es apta para el consumo humano.