Los diagnósticos son sofisticados algoritmos desarrollados a partir de las muchas décadas de experiencia de METTLER TOLEDO para conocer el modo en que las condiciones del proceso afectan a los sensores analíticos. Los parámetros específicos de los sensores, como las características del sistema de referencia de un sensor de pH y el vidrio sensible al pH, se han determinado mediante exhaustivos tests de degradación a largo plazo. Cada sensor tiene una duración de vida útil fija en número de días. Dependiendo de las condiciones del proceso a las que se haya expuesto un sensor, así como de su «estado» actual, ese tiempo de vida útil se ajustará. Si las condiciones del proceso son adversas (p. ej., una temperatura alta constante), el tiempo de vida útil disminuirá más rápidamente que el del mismo sensor utilizado en un proceso con menor adversidad. A partir de la información sobre el proceso y el estado del sensor, los algoritmos también pueden calcular cuántos días quedan para realizar la calibración con el fin de restablecer la fiabilidad de la medición y cuándo se debe sustituir el sensor.