Cualquier fabricante o departamento responsable del suministro de sustancias químicas valiosas estará familiarizado con los retos que presenta el llenado manual.
Estas sustancias pueden ser materiales de referencia certificados y estándares, catalizadores o enzimas, reactivos o normas de trabajo de sustancias medicamentosas para uso interno.
Tanto si se trata de un repositorio centralizado que abastece a otros departamentos internos como de un proveedor de productos químicos que comercializa dichas sustancias en el mercado, el reto de tener que preparar cientos de viales o botellas al día es parecido.
Retos de las operaciones de embotellado y llenado
Los retos más frecuentes son:
- Pesajes repetitivos con una espátula durante muchas horas al día, lo que conlleva el riesgo de sufrir lesiones por esfuerzo repetitivo (LER).
- Concentración intensa para evitar errores y pesar pequeñas cantidades en contenedores de cuellos pequeños sin producir derrames.
- Llevar un equipo de protección personal incómodo durante un largo tiempo
- Trabajo restrictivo en una caja de guantes o aislador, al tiempo que se intentan realizar operaciones delicadas
¿Constituye la dispensación automatizada de sustancias pulverulentas una solución óptima para usted?
- ¿Produce lotes pequeños, de hasta 250 botellas o dosis, del mismo compuesto?
- ¿Pesa manualmente de 1 a 500 mg de compuesto de forma repetida?
- ¿Pesa compuestos tóxicos, peligrosos o sensibles al aire?
- ¿Tiene que pesar diferentes tipos de sustancias pulverulentas en cientos de tamaños de contenedores diferentes?
- ¿Realiza tareas de pesaje en carcasas de balanza, cabinas de seguridad o cajas de guantes?
- ¿Trabaja de acuerdo con los requisitos de GLP o GMP?
Si su respuesta a estas preguntas es afirmativa, lea nuestra nota de aplicación y descubra cómo puede ayudarle el pesaje automatizado de sustancias pulverulentas a superar estos retos en las aplicaciones de embotellado y llenado, así como ofrecer ventajas a sus procesos.